Seres Extraños

Vaya que la persona es un ente incomprensible. Ahora que he tenido tiempo de sobra por lo de la cirugía practicada a mi pierna y viéndome envuelto en desniveles de ánimo estando a veces con el mejor y otras veces peor que quinceañera a la que no se le va a hacer la fiesta con la que siempre soñó me he puesto a pensar mucho y ni siquiera tan profundo.

He conocido nuevos artistas musicales, que es la música la que me acompaña la mayor parte del tiempo siendo accesible en cualquier horario; he descuidado a mis perros porque no los puedo sacar a pasear como mis dos atletas border collie se merecen, mi bicicleta me hace ojitos y a veces me imagino que está sentida conmigo, acabé un par de libros que quedaban pendientes y he visto algo de T.V. recordando en multiocasiones un comercial "nosotros tenemos más influencia sobre tus hijos que tú tienes". Y dentro de toda mi inactividad y sin querer me he dedicado sin remuneración a analizar al género humano.

Somos los que queremos vacaciones eternas pero la inactividad nos hace sentirnos hasta culpables, queremos todo el dinero del mundo pero en alcanzar esa meta podemos cometer las más egoístas acciones y al conseguir más muchas veces el logro viene acompañado de nula satisfacción. Nos queremos dar a los vicios que a la postre nos damos cuenta que terminan con nosotros y para ello valdría la pena ver el "documental" - SEX, the revolution- del canal VH1. Queremos poder para hacer el bien y muchos de los que cuentan con esa joya lo usan para abusar de pueblos enteros. Queremos leer para saber más y al saber más nos da más coraje saber lo poco que la masa sabe. Envidiamos para hacernos daño, cuando tenemos no damos. Buscamos cambiar al mundo empezando por nosotros mismos, buscamos crear un movimiento para los mismos efectos y solernos encontrarnos con que los buenos no lo son tanto y la cantidad de cosas que uno hace por dinero y entonces nos llenamos de sensaciones, nos encaprichamos, nos emberrichamos, hacemos corajes, estallamos de felicidad, somos puro gozo, generosidad, maldad. El género humano que crea, en otros lugares destruye, los gobiernos luchando contra el cambio climático con discursos y desalentándolo con omisiones.

A lo anterior hay que sumarle el género: Mujer/hombre y sus distintas formas de percibir la vida y a eso los que son radicales tanto machos como feministas, las hormonas y el es que no me entiende o todo lo ha de hacer más complicado, los niveles escolares, los estatus sociales y la diversidad cultural, las costumbres del hogar, la religión, la política, las diferencias físicas, los intereses particulares de la colectividad, la incongurencia, la intolerancia y el querer imponer el correcto punto de vista.

¿A dónde vamos?

Todo cuenta, y al final nada es para siempre.